Toma siempre tus propias decisiones: me comprometo con mis objetivos o renuncio a ello.

Cada uno tiene sus propias necesidades y sus propios vacíos.

Pero lo que te digan los demás nunca va a llenarlos del todo.

Que sea, en todo caso, tu elección.

No te engañes. Si algo falta en tu sistema de objetivos no es porque el sistema no valga. Es porque no le has dedicado suficiente tiempo a meditarlo y conocerte a ti mismo.

Cada minuto dedicado a comprenderte te ofrece el mejor conocimiento que puedes atesorar.

Un grupo dividido es difícil que avance. Cada uno querrá ir en una dirección.

Si tú mismo estás dividido entre tus objetivos, tu propósito y tus valores, ¿cómo vas a conseguir avanzar?

Estructura, coherencia, compatibilidad. Sin todo eso, el puzzle nunca llegará a completarse.

El equilibrio es lo que te va a permitir seguir adelante. Sin él, es fácil que caigas y no quieras levantarte.

El equilibrio restará fricción a lo que hagas. Sin él, siempre habrá algún obstáculo que te retrase.

Y lo más seguro es que ese obstáculo sea tu propia insatisfacción.

The two most important days in your life are the day you are born and the day you find out why.

Mark Twain