La vida es un rascacielos: tenemos que tener unos cimientos sólidos. A partir de ellos, ir creciendo piso a piso.

Entre medias, encontramos los problemas de querer llegar arriba.

Si los superamos, qué bien se verá nuestra obra y qué maravillosas serán las vistas desde arriba.

No te creas a los gurús. Créete los conceptos.

Si no lo entiendes, tu labor consiste en indagar en profundidad. Después, aplicarlo a tu propio contexto.

Si entiendes el concepto y lo has aplicado a tu manera, está perfecto.

No sigas ciegamente lo que a otros les vale.

Un sistema es un conjunto de elementos conectados entre sí.

Si hacemos de nuestra vida un sistema, debemos trabajar las conexiones.

Con conexiones, las acciones alcanzan coherencia y se hacen efectivas.

Cada tema nos lleva al siguiente, a otro relacionado. Siempre enlazados.

Nuestro propósito es un tamiz: separa lo importante de lo accesorio.

Es una brújula: orienta el sentido de nuestras siguientes acciones.

Es un patrón: nos permite comparar lo que es con lo que queremos que sea.

Es un intérprete: nos traduce nuestras experiencias según su impacto.

When the students are ready, the teacher will show up.

Viejo aforismo