Si realmente quieres resolver un problema a alguien.
Si de verdad te enfocas en las necesidades de tus clientes.
Si buscas un relación cercana y mutuamente beneficiosa con ellos.
¿No es lo lógico pedirles que te ayuden a construir tu producto?
Las nuevas herramientas tecnológicas han acercado el trabajo a cualquier ubicación.
Pero la propia tecnología ha creado nuevos contextos.
Más sutiles. Menos evidentes.
Pero que también debemos considerar para optimizar nuestra efectividad.
No existe una alternativa óptima en cada momento.
Simplemente, porque las cosas han cambiado al momento siguiente.
Pero sí existe una solución un poco mejor a la actual.
Y esa es la que nos tenemos que empeñar en encontrar y aplicar.
Podemos usar la IA para pequeñas cosas.
Redactar un correo, transcribir una reunión, crear una presentación.
Y daremos un pequeño paso adelante.
O la podemos usar para que nos ayude a pensar.
Y dar un gran salto en términos del valor aportado.
Cuando cambiamos nuestra forma de mirar las cosas, las cosas que miramos cambian.
Wayne W. Dyer